Antes de hacer algo, hay que planear, esto es lo primero que usted tiene que hacer en los negocios;  planear y volver a planear y continuar planeando hasta que su plan funcione correctamente de acuerdo a los resultados que usted desea. La principal causa del fracaso en los negocios es no planear por adelantado y también no modificar sus planes si por alguna razón no funcionan. Dejar de planear es como planear el fracaso.

Pensar es el trabajo mejor pagado en los negocios por un factor especial llamado consecuencias.
Siempre se puede determinar cuán valiosa e importante es determinada actividad midiendo las consecuencias potenciales de realizarla o no realizarla.


 Las consecuencias potenciales de beber una taza de café o charlar con un compañero de trabajo son virtualmente nulas. No tiene importancia alguna si lo hace o no. Pero las consecuencias de planificar, de sopesar sus acciones antes de comenzar, pueden ser enormes. Y pueden marcar toda la diferencia entre el éxito y el fracaso, la pobreza y la riqueza, la felicidad y la infelicidad, una vida holgada o una vida desesperada.

Todo lo que usted es o llegará a ser es el resultado de sus elecciones y decisiones. Estas le han traído hasta donde se encuentra hoy. Si no se siente contento con su situación actual, debe hacer nuevas elecciones y tomar mejores decisiones para el futuro. No hay otra manera. Y pensar es el ingrediente esencial, tanto de las elecciones como de las decisiones.