Todas las riquezas, sin importar su naturaleza, empiezan
como un estado mental: y recordemos que el estado mental es la única cosa sobre
la cual una persona tiene control completo y absoluto.
Resulta muy significativo que el creador facultó al hombre
para tener control sobre sus propios pensamientos y el privilegio de
conducirlos por la senda de su elección.
La actitud mental positiva es importante porque convierte el
cerebro en algo así como un imán el cual atrae a la contraparte de los pensamientos,
intenciones y propósitos de uno. También atrae a la contraparte de nuestros
temores, preocupaciones y dudas.
Una actitud mental positiva es el inicio de todas las
riquezas, sean estas riquezas de naturaleza material o de naturaleza
intangible.
Recuerda que nuestros pensamientos dan forma a nuestra mente
y moldean la personalidad de cada uno. Los pensamientos son cosas y cosas muy
poderosas cuando están mezcladas con firmeza de propósito, perseverancia y un
deseo ardiente de traducir todo ello en riqueza u otros objetos materiales. Sus
pensamientos pueden conducirle al desastre o a la victoria y felicidad.